Amenaza a la salud pública el ruido de las nuevas rutas aéreas sobre el Valle de México

El ruido producido por el sobrevuelo de aeronaves en el Valle de México, con el rediseño de rutas hacia el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) representa una grave amenaza a la salud pública, determinó un estudio realizado por el colectivo Más Seguridad Aérea, Menos Ruido.

El impacto que ya se genera en 26 colonias hacia el norte de la zona metropolitana, incluidas unas del municipio mexiquense de Huixquilucan, podría ampliarse hacia el nororiente del Estado de México, con la puesta en operación del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), en marzo próximo.

Ruido amenaza la salud pública

En conferencia de prensa se dieron a conocer los resultados del “Estudio de la inmisión acústica del ruido en tierra, producida por el sobrevuelo de aeronaves”, el cual determinó que se está frente a una grave amenaza de salud pública porque las mediciones de decibeles realizadas en distintas horas del día, excede los valores recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Rafael Trovamala Landa, doctor en Ciencias por la Universidad de Oviedo e investigador invitado del laboratorio de acústica del National Institute of Standards and Technology, fue el encargado de realizar el estudio para establecer el nivel de agresión ambiental por esta causa, en un periodo del 3 al 19 de mayo de 2021, durante más de 672 horas, en 26 puntos.

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El también catedrático del Instituto Político (IPN) concluyó que la frecuencia del sobrevuelos a lo largo del día y la noche, agrava las molestias.

La especialista en el tema, Jimena de Gortari Ludlow, agregó que el sonido suele ser clasificado como ruido cuando daña el mecanismo auditivo.

Cuando causa efectos que son dañinos para la salud y la seguridad, quita el sueño y no deja descansar.

Los efectos del ruido son dañinos para la salud y la seguridad

Señaló que al hasta el momento no hay información al respecto.

“He estado comunicación con algunos de los pobladores cercanos y no hay ningún acercamiento por parte de la autoridad, tampoco se conoce nada que sea público, sobre el impacto que se va a tener en materia de ruido, ni siquiera sé si se está considerando la cuestión de servidumbre acústica necesaria a la hora de planear un aeropuerto”, explicó.

Reconoció que es a la autoridad a quien se le habría de exigir esa información y los estudios respectivos.

Y es que los expertos coincidieron en que existe poco interés para hacer este tipo de estudios.

“Este mal invisible ha pasado desapercibido por las administraciones de la ciudad; ya que, a pesar de existir normativa local y federal, son escasos los planes de acción que busquen mejorar la situación; el ruido no aparece ni en la política pública ni en los discursos que prometen una ciudad más humana, sin olvidar los planes de desarrollo urbano”, agregó Jimena De Gortari.

Reiteró que a través del colectivo hay algunos avances en materia de legislación.

Y persiste la necesidad de que el ruido se visibilice y no se normalice.

SPM