Centros Cheleros en Toluca son un problema que va en aumento

Se trata de un asunto grave que invade espacios públicos

Los Centros Cheleros en Toluca se han convertido en un problema para la comunidad, ya que funcionan en la clandestinidad y originan ambientes hostiles para los vecinos; pese a esto se pueden encontrar en diferentes puntos de la ciudad.

Así lo expresó, Bertha Zahira Hernández, delegada del Seminario 2 de Marzo, quien añadió que los centros cheleros han propiciado narcomenudeo y violencia en la zona pese a que las autoridades hacen recorridos.

La mayoría de centros cheleros en Toluca son ilegales

De acuerdo al Bando Municipal, se considera como una infracción grave vender bebidas alcohólicas en la vía pública.

Además de no contar con la licencia correspondiente, venderles a menores de edad y participar en riñas o cometer conductas que alteren el orden en eventos públicos.

Mientras que, quienes desean operar legalmente, deberán obtener una licencia de funcionamiento o refrendo para establecimientos con venta de bebidas alcohólicas para consumo inmediato o al copeo.

Sin embargo, se instalan pese a la presencia de las autoridades y continúan con el escándalo.

Principalmente en las calles aledañas al mercado del Piojo, donde los vecinos han recibido amenazas por parte de los vendedores, explicó ante miembros del cabildo.

También pidió que se atienda la invasión en Torres Chicas de Lago Sayula a Lago Coyuca, área que fue ocupada ilegalmente.

Pero señalo que las administraciones anteriores hicieron caso omiso del problema. 

“Ya llegaron personas a vivir ahí, donde los delincuentes se reúnen, ya cercaron con llantas, alambre, llegan ahí y hacen sus fechorías, el 15 de septiembre hicimos un evento ahí, nos robaron la alfombra del templete y salieron con una pistola.

Se trata de un asunto grave que invade espacios públicos

Consideró que se trata de un asunto grave que impide a la comunidad usar el parque, mismo que está en mal estado y sin luminaria.

“Urge que se recupere esa parte de torres chicas, empezaron con puestos de dulces, comida y ahora viven ahí “.

Por último, compartió que llevan cuatro semanas sin agua y, aunque les han mandado pipas, no es suficiente porque son muchas las familias afectadas.

SPM