De andar de compartidos e irresponsables…
Antevasin
El uso de la tecnología genera nuevos vocablos que requieren ser definidos para comprenderse y volverse parte del día a día, palabras como: textear, tuitear, facebookeando, etc, se han convertido en parte del día a día de millones de personas que utilizan el espacio virtual para ser y existir.
Como resultado de estas interacciones se ha desprendido un nuevo vocablo: Sharenting,
-Seguramente ya están muchos de ustedes fastidiados con la terminología llena de anglicismos, pero pues ni modo, así es esto de ser cibernautas. – Y, bueno, ¿qué es el dichoso “Sharenting ese”, pues bien, es un termino acuñado a partir de dos palabras en inglés: Share – compartir y Parenting – paternidad, crianza, paternar. Es decir, es la crianza que se comparte a través de las redes sociales, sin reparar en que en muchas ocasiones compartir la forma en que interactuamos con nuestros hijos puede volverse riesgosa, es decir vulneramos a nuestros hijos, sobrinos, nietos, etc.
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Imagina un sábado cualquiera en el partido de fútbol de tu hijo o hija, después de quitarse dos marcas, sigue de frente, sigue de frente, se quita a otros dos, la pelota en el aire, la pelota entra a la portería, y hasta el fondo, los gritos de todo tu equipo, todo mundo celebra: ¡GOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO! – todos, menos los del otro equipo – y tú de inmediato desde tu orgullo, tomas fotos y las subes más rápido que de volada a tu Feisbú, Xuirer – con X, porque así le dio la gana a don Musk, – Insta y cuanta red social tengas. En el pie de foto escribes: ¡Mi campeón! / ¡Mi campeona! / ¡Mi campeone! El chiste es que en menos de cinco minutos todos tus seguidores, stalkers, gente buena ondita y hasta los mala leche ya se enteraron del triunfo, de que los sábados tu peque juega al fut, y si trae el logo de su escuela, hasta de dónde estudia. ¿Te das cuenta?
U otro día cualquiera, ¡feliz cumpleaños! Fotografías de toda la familia y luego todas las fotos en donde voluntaria o involuntariamente ridiculizas al niño o niña que no cuenta con el criterio, ni con la posibilidad de decirte que no quiere que subas sus imágenes. Y tú en la felicidad y el desorden del momento olvidas la objetividad y la cantidad de depredadores de todos tipos que abundan en la redes, y todo lo que son capaces de hacer con una sola imagen, desde la oferta de venta de infantes, hasta el tráfico de órganos y muchas cosas más de la que de verdad no creo que tengas ganas de enterarte. ¿De verdad es tan necesario compartir momentos PRIVADOS con los otros? Y darles la posibilidad de entrar a la intimidad de tu hogar.
Seguirías subiendo las imágenes de aquellos a quienes más amas si supieras que con una sola imagen se pueden realizar cientos, miles y millones de imágenes a través de la Inteligencia Artificial que muestren a esa persona haciendo cosas que jamás hubieras imaginado y que tú te conviertes en su peor enemigo cuando sin cuidar términos de privacidad las dejas ahí, generando su huella en línea, para que a quien le dé la gana tenga acceso a ellas.
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Probablemente muchos de los miembros de mi generación, de la mía, de la tuya, de la nuestra, nos iremos del mundo y no alcanzaremos a vislumbrar los alcances de las nuevas tecnologías, tan es así que ve el alcance que ha tenido la huelga de guionistas y actores por la precarización laboral y el mal uso que querían realizar de su imagen en momentos futuros.
Ahora nos enfrentamos a realidades que aún no llegan. Sería bueno cuidar a los que tanto nos importan, evitando ponerlos al alcance de cualquier cualquiera – esto dicho sin el ánimo de ofender, sino para ejemplificar la variedad y el amplio rango de posibilidades que damos cuando subimos una imagen y presionamos ENTER – lo que de ahí se desencadene deja de estar en nuestro control.
¿La invitación? ¡Gobiérnate! Y guarda tus imágenes importantísimas en un disco duro, o compártelas con público cuidadosamente seleccionado, te juro que a Panchito J16 le importa un pepino el gol de tu hijo o hija, pero quizás a los contactos de Panchito, les llame la atención y no por las razones adecuadas.
¡Cuida a quienes amas! Comentarios, quejas, sugerencias son bien recibidos en culturadentro@gmail.com
Y por si aún no me crees, aquí te dejo un videíto que te va a dejar frío:
El video de Ella subtitulado