Juez dicta sentencia contra ecocidio en Jilotzingo
Después de 4 años de la presentación del juicio de amparo contra el proyecto mega residencial de Bosque Diamante, Jilotzingo, donde pretendían construir 20 mil casas en una zona de reserva forestal, el juez décimo de distrito del Estado de México dictó sentencia en contra del ecocidio que querían impulsar los desarrolladores inmobiliarios.
Miguel Miramontes Lira, asesor jurídico de la Organización Civil “Amigos por el Bosque”, comentó que esta semana el juez giró la orden de que se revoquen todos los permisos contra el grupo empresarial de la familia Funtanet, que en su momento les autorizó el ex gobernador Eruviel Ávila Villegas.
Con esta resolución, dijo, las 238 hectáreas de propiedad privada seguirán siendo bosque. Explicó que se ganó ante el Juzgado de Distrito el amparo para efectos, porque el juez les informa que todos los permisos estuvieron mal y están en su derecho de volverlos a solicitar, pero en forma transparente.
Juez dicta sentencia contra ecocidio en Jilotzingo
Este amparo, dijo, se perdió y después de esto pasará a un juzgado Colegiado, donde los Magistrados van a confirmar o revocar.
La sociedad, las organizaciones Ecologistas y grupos ambientalistas, comentó, estamos optimistas porque confiamos en que se confirme revocación del amparo.
“¡Ganamos!, el desarrollo inmobiliario bosque diamante no será realidad, porque esa decisión iba en detrimento de la reserva forestal y de la fábrica de agua que constituye la zona boscosa de la región de Jilotzingo-Tlazala.
Además, que el área Protegida quedará como tal y que se exige en la resolución a las autoridades estatales, municipales, a la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) entre otras instancias, que se haga lo que se tenga que hacer para resguardarla.
Insistió Miramontes Lira que este es un precedente impresionante, porque no se había visto una sentencia de ese tamaño en favor de la ciudadanía y de la ecología.
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Los permisos se aprobaron durante la gestión de Eruviel Ávila
Entre los permisos que se habían aprobado en el periodo durante la gestión de Eruviel Ávila, se encuentra el cambio de uso de suelo, el de factibilidad, que les permitía urbanizar una gran porción del bosque para crear un desarrollo campestre y el más importante, el de impacto ambiental.
Vecinos del lugar y asociaciones civiles presentaron el amparo, pues consideraron que dichas autorizaciones afectaban su derecho fundamental a un medio ambiente sano, así como el principio de protección ambiental,
La familia Funtanet tenía como proyecto la tala de más de ciento ochenta mil árboles, lo que conllevaba a la destrucción de doscientas treinta y ocho hectáreas de terrenos forestales, así como el impacto ambiental.
Asimismo, refieren que se les privaría a los pobladores de la zona de diversos servicios ambientales, como la captación, infiltración y provisión de agua de calidad, la conservación de la biodiversidad, la mitigación de los efectos del cambio climático, mediante la captura y almacenamiento de carbono, la retención y formación de suelo, la belleza escénica y el aprovechamiento económico para el desarrollo eco- turístico.
TAR
