Video: Karla Sánchez taclea a la discriminación en un juego para hombres

Jugadora de futbol americano

Por Alan Luna

El campo de juego está listo, las luces encendidas, los equipos alineados y el silbatazo no se hace esperar; el pasador tiene la encomienda de llevar ese balón a las diagonales del equipo contrario; y por ello utiliza sus piezas claves, corredores y receptores concentrados para conseguir la meta. Ente ellos, Karla Sánchez.

Se escucha la orden, se mueven todos, el ruido de los golpes, el QB de Redskins observa, manda su pase al número 81; quien esquiva el primer contacto, corre, tres, cinco, seis yardas, pero es detenido con un fuerte impacto casco contra casco.

Queda tendido un rato, se levanta, festeja el yardaje recorrido y es llamado por su coach; se quita el casco y su larga cabellera indica lo contrario a lo que se cree que hay en un juego acaparado, en su totalidad, por hombres; y es que el receptor 81 no es uno de ellos sino una de ellos, su nombre: Karla Andrea Sánchez Méndez.

Karla Sánchez participa en la Liga Fademac

La receptora de 18 años de edad, quien es la primera mujer dentro la liga Fademac, no se amilana, ella le entra al parejo de todos, golpea, corre, recibe, y es “sacudida” por otros, al igual como lo hace su hermano, quien es para ella un ejemplo a seguir en la vida y que por él se encuentra jugando futbol americano.

Pero el gusto por el juego de las tacleadas es una herencia familiar, asegura Karla; quien inició a los 9 años de edad en los Pieles Rojas del Instituto Politécnico Nacional (IPN); y que gracias al apoyo de sus padres se mantiene dentro de lo que ella llama pasión.

“Es una disciplina y pienso que es algo que te puede formar para la vida. Me ha dejado amistades, ser ordenada, tener metas fijas, pero me ha dejado muchas cosas como valores, retos y recuerdos».

Tiene 9 años jugando con varones y ha sufrido discriminación

“Tengo 9 años en el futbol americano y empecé en Pieles Rojas, seguí en Burros Blancos, equipo también es del Poli, pero me cambié de escuela, así que entré a Mayas y ahora estoy aquí en Redskins”.

La estudiante de preparatoria, quien cursa su último año en el Instituto Cultural Sucre en Naucalpan de Juárez, Estado de México, explicó que su proceso como jugadora no ha sido miel sobre hojuelas, ya que por ser mujer ha sufrido discriminación.

En su etapa infantil, explicó que no le costó mucho equiparse, ya que las diferencias en cuanto a fuerza, peso y estatura con los niños no son tan marcadas; por lo que no le fue complicado jugar.

“Pero al crecer estas diferencias se hacen muy notorias, entonces empezó a ser un proceso como muy difícil y complicado, porque viene esa discriminación de que las mujeres no pueden jugar futbol americano y mucho menos equipada, entonces mucha gente me hizo a un lado y es con lo que he tenido que batallar en este deporte.

“Siempre se ha tenido el estereotipo de que la mujer es débil en estos aspectos y de que no podemos hacer estas cosas, ya que el hombre es el fuerte. Pero la mujer es fuerte, y aunque el hombre, biológicamente es más fuerte, pero no, porque creo que tenemos las mismas oportunidades”, aseguró.

Sus padres, la base de su fuerza e ideología

Este pensamiento de igualdad y fuerza es lo que sus padres le han inculcado a Karla, y gracias al apoyo que ha tenido de ellos sabe que en la vida hay un equilibrio y que todo debe de ser parejo.

“Mis padres nunca me han dado un no por respuesta. Están seguros que en la vida todo es parejo y que no hay este apartado de que hombres con hombres y mujeres con mujeres, sino que todos se dan en la torre con todos”, aseguró.

El medirse al igual que sus compañeros dentro y fuera del terreno de juego le ha ayudado a ganarse el respeto de ellos, quienes la tratan como si fuera hombre en cuestión de bromas, pero con la debida consideración, porque saben que es una dama.

Pero a la hora de ponerse el equipo completo, Karla sabe que le van a pegar, porque el rival no se va a tentar el corazón y por ello se prepara y ejercita.

“Fue el querer hacer algo diferente y darme cuenta de que yo puedo hacer lo mismo que un niño. Siempre me ha gustado ser ruda y me lo dicen, pero también mantengo la postura de que sigo siendo una dama. Entonces el ser fuerte y ser diferente a los demás es lo que me distingue”, aseguró.

De receptora a coach

Gracias al apoyo que ha recibido por parte de Redskins y por su talento, Karla ha avanzado yardas, registrado varios primeros y dieces hasta llegar a las diagonales; ya que desde hace tres meses es la nueva entrenadora de categorías infantiles del equipo de Lomas Verdes.

“¿Cómo es entrenar niños?”, analiza la pregunta, “no voy a decir difícil, podría decir algo diferente, algo nuevo. Porque tienen sus mañas, sus formas. A veces son distraídos, no entienden y hay que repetirles más de cinco veces las cosas, pero es muy divertido a final de cuentas».

“Ha sido formativo, porque he aprendido cosas que no sabía que yo podía hacer, como jugadas. He aprendido a tener paciencia y que a un niño no se le puede corregir a gritos, sino que hay que ir llevándolo a hacer las cosas de una forma tranquila. Porque para que el niño te tenga respeto tú también debes de ser respetuoso, entonces es recíproco”.

TABLA

Una dama ruda

Nombre: Karla Andrea Sánchez Méndez

Edad: 18 años

Equipo: Redskins

Posición: Receptora

Equipo NFL: Cowboys Dallas

ASME