‘Limpia’, historia de Yanim, un libro como un laberinto
Probablemente, sólo si el improbable lector de este texto es nacido en Chile, sabrá el significado de la palabra “quiltra”. Pues bien, con ese vocablo los habitantes de aquel país identifican a los perros que no son de abolengo, criollos pues, resultado de la mezcla de dos o más razas.
Limpia (2022) es la historia de la Yani, uno de esos animalitos que viven en la calle y sobreviven gracias a la voluntad de buenas personas, de ésas que no abundan en el mundo. Una tarde Yani es encontrada por Estela, una mucama que, de lejos, se vuelve la dueña de la perrita.
No. Limpia es más bien la historia de Estela, joven mujer, empleada doméstica que, por mejorar su economía y no tanto porque realmente lo deseé, viaja del sur del país a Santiago, donde encuentra trabajo aseando la casa de una pareja acomodada, que al cabo de un tiempo se vuelven padres de la Julia, su primogénita y única descendiente.
‘Limpia’, historia de Yanim, un libro como un laberinto
Por otro lado, también podríamos decir que el libro es la historia de la breve vida de la Julia, esa pequeña berrinchuda, caprichosa y enferma que se niega a comer nada y que lo hace únicamente cuando Estela le levanta la voz. ¿Es posible afirmar que la Julia es el personaje más complejo de los tremendos asuntos que se exponen en las páginas de este singular volumen? La respuesta es sí. La Julia, a su corta edad, es inasible y escurridiza. El libro es, a veces, como un laberinto del que ella entra y sale a su antojo y otras, como un tablero sobre el que mueve las piezas según sus deseos; por momentos se hace cómplice de Estela y, exclusivamente cuando comprende que está en desventaja y sin opciones, se acerca a su mamá para contarle la verdad, aunque sea eso, solamente su verdad.
Limpia es también la historia de otros personajes, unos que tienen menos peso en la trama del libro pero a los que es necesario mencionar porque son el complemento idóneo para hacer de ésta una historia escalofriante y desgarradora. Son pocos: la mamá de Estela, mujer de provincia, acostumbrada a las duras faenas del campo; una de ésas que tienen conocimientos empíricos sobre un montón de cosas y que cada decisión que toma la basa en tradiciones que, de boca en boca, han pasado de una generación a otra. Sus llamadas telefónicas son para su hija como un remanso frente a la convulsa vida citadina. Los padres de Julia son un matrimonio que tiene una hija sólo para completar la familia, pero cuyo cuidado delegan a la criada; es sólo cuando las cosas están fuera de control que escuchan a la infante. En unas líneas se hace una cruda descripción del momento en que el matrimonio es capturado por Estela sosteniendo relaciones sexuales.
El Raúl es un satélite en cuyas acciones y palabras se presiente el deseo erótico que le provoca Estela. Nomás una vez tiene un inverosímil, pero posible, vertiginoso encuentro carnal callejero con la mujer. Además es también, en ocasiones, propietario de la perrita.
TE SUGERIMOS: “La verdad es necesaria, pero tiene un aspecto insoportable”, entrevista con Sergio Blanco
Limpia es la tercera obra de la escritora chilena Alia Trabucco
Fantasmas, no como los creados por Rulfo, sino unos de carne y hueso que deambulan por un país al borde del colapso.
Su idiosincrasia le indica a Estela que las muertes vienen de a tres: primero se le va Yani, luego se entera del fallecimiento de su madre y, para cerrar el círculo, ella misma encuentra a Julia flotando sin vida en la piscina de la casa familiar. Rescata el cuerpo sin saber si fue un accidente o si, en un arranque postrero, la infante se quitó la vida para vengarse de haber venido a un mundo con el que nunca pudo comulgar.
Limpia es la tercera obra de la escritora chilena Alia Trabucco Zerán (1983), y con ella demuestra que es una de las voces más fuertes de la literatura latinoamericana actual. La historia de su país debe latir con fuerza entre los de su generación. No se dice, pero es evidente que la narración transcurre durante los sucesos que se verificaron en aquel fatídico 1973 chileno, que sobrecogieron no sólo a esa nación, sino a América Latina entera.
Información Saúl Toledo Ramos
TAR
