Limpiaparabrisas esperan, aunque “con poquito” a los Reyes Magos

Limpiaparabrisas esperan, aunque “con poquito” a los Reyes Magos

Limpiaparabrisas o “mechuderos” trabajan más de 10 horas para que los Reyes Magos puedan llegar a sus hogares.

Miguel González
Enero 5, 2025

Los Reyes Magos llegan cada año agotados y ya con pocos juguetes a sus hogares, pero aun así decenas de familias de limpiaparabrisas o “mechuderos” confiaron una vez más en que, “aunque sean pocos juguetes” los tres reyes de oriente llevan alegría a sus hijos este 6 de enero.

Limpiaparabrisas esperan que lleguen los Reyes Magos

Godino, un joven padre de familia, pasó hasta 12 horas trabajando en el cruce que forman las avenidas Bordo de Xochiaca y Adolfo López Mateos en los últimos días en su afán para que Los Reyes Magos vean su esfuerzo y lleven aunque sea la cuarta parte de lo que pidieron sus hijas.

“Lo que pidieron mis hijas a los Reyes Magos, la verdad sí se lo han ganado con sus calificaciones en la escuela y sus esfuerzos en la casa, ellas piden un celular, una tablet y otras cosas que sí son algo costosos y pues a ver si los Reyes alcanzan a traerles aunque sea la cuarta parte de lo que piden”, compartió.

Sus hijas, Azul y Mayte de 11 y 9 años de edad, cursan el cuarto y sexto grado de primaria, respectivamente, y ambas esperan ilusionadas sus regalos.

Más de 10 horas de trabajo para convencer a los Reyes Magos

María Antonia, quien ha trabajado hasta diez horas en el mismo crucero vendiendo dulces, o limpiando parabrisas, es madre jefa de familia y tiene a su cargo a sus cuatro hijas, sus gemelas de 12 años, otra de 11 y una más de siete años.

“Varios de los que trabajamos en los cruceros y tenemos hijos le estamos estoy echando ganas para convencer a los Reyes de que les lleven algo, mis hijas pidieron una casa de campaña, un teléfono celular, unos audífonos y una bocina, pero hay veces que a los Reyes no les alcanza y pues traen lo que pueden”, compartió.

A Toña le preocupaba que los seres mágicos encontraran el camino a la casa que renta con sus hijas desde hace varios años en Nezahualcóyotl, pero confío en que llegarían.

Con mechudo, botella de agua con jabón y un pedazo de goma en mano, estos padres de familia luchan desde la informalidad por darle lo necesario a sus hijos, incluida la alegría del 6 de enero.

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MPH

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