Mujeres en Edomex, en quienes recaen trabajos de cuidado entre violencia y precariedad
El trabajo de cuidados ha recaído en las mujeres, incluidas las mexiquenses, lo cual es poco reconocido y se llega a desarrollar en condiciones de precariedad y violencia, por ello debe ser parte del debate público para visibilizar el problema.
Así lo afirmó la especialista en perspectiva de género, Monserrat Herrera, durante la Tercera Sesión del Seminario de “Pensamiento Feminista, Avances y Retos de los Cuidados”, organizado por la Secretaría de las Mujeres estatal.
Explicó que instalaron un Centro de Atención para Mujeres Rurales Indígenas en San Felipe del Progreso, donde buscan identificar las necesidades de atención de las usuarias, incluido el respeto a sus derechos y remuneración de trabajo de cuidados.
Mujeres en Edomex en quienes recaen trabajos
“Que identifiquen las circunstancias en las que se encuentran, que puedan ser remuneradas y conscientes del ejercicio de derecho que ellas tienen, fortaleciendo sus derechos y una vida sin violencia, para que la trabajadora del hogar no vivan agresiones”.
Lamentó que en las comunidades alejadas, muchas mujeres desconocen el avance y las pláticas sobre estos temas, aunque se trata de una situación que impacta de forma negativa en su tiempo, descanso, educación, empleo, salud y deporte.
“El tema nodal es el de los cuidados, porque en buena parte dedican ese tiempo a darlo a otras personas y ser sostenibles para el desarrollo de la familia, de acuerdo a ONU mujeres, hay que poner en práctica las 3 R del cuidado: reconocer, redistribuir y reducir”.
En México, dijo, hay 2.5 millones de mujeres de 15 años o más ocupadas en el trabajo doméstico remunerado, de los cuales, 97 por ciento lo hace de manera informal. El valor económico de las labores domésticas y cuidados reportó un monto de 6.8 billones de pesos, igual a 26 por ciento del PIB nacional.
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Mujeres encargadas de hogar por herencia cultural
“Es importante tomarlo en cuenta, que haya estadísticas, porque se reconoce que es un problema público, se reconoce la importancia de contar con números que nos identifiquen la dimensión de la aportación y que nos permite ver que es una actividad principalmente desarrollada por mujeres”.
Se trata de una herencia cultural que le ha encargado a las mujeres el trabajo de los cuidados en el hogar, asignándoles un rol específico; sin embargo, tenemos el derecho a no cuidar.
“Para ellas es romper con muchos estereotipos, tradiciones que han sido enseñadas y normalizadas cada regeneración”.
TAR
