Murillo Karam: el exprocurador acusado de tortura y pieza clave en el caso Ayotzinapa

El pasado 3 de noviembre, el ex funcionario Jesús Murillo Karam, ingresó al Centro Nacional de Cardiología ante una emergencia médica, allí permaneció casi dos semanas hasta su recuperación el día jueves 1 de diciembre. 

Derivado de sus complicaciones de salud, Murillo Karam ha solicitado la petición de prisión domiciliaria, misma que será discutida durante una audiencia programada para las 18:00hrs del primero de diciembre. Misma que resolvió negarle la petición de prisión domiciliaria por posible riesgo de fuga. Por lo que deberá volver a las instalaciones del reclusorio Norte de la Ciudad de México. Ante esto, la defensa del ex funcionario, calificó la medida como «peligrosa y desproporcionada», declaró José Javier López, abogado defensor del caso.

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El ex funcionario solicitó atención médica para monitorear su colesterol y triglicéridos altos, sin embargo tuvo que ser intervenido quirúrgicamente a una endarterectomía carotidea de alto riesgo para eliminar placas que bloquean las arterias.

¿Quién es Jesús Murillo Karam?

Murillo Karam, de 74 años es abogado por la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo, ha desempeñado diferentes cargos a lo largo de su vida política, entre los que destacan: diputado, senador y gobernador de Hidalgo en el periodo de 1993-1998. Posteriormente fue procurador general de la república de 2012 a 2015. Entre febrero y agosto de 2015 desempeñó el cargo de secretario de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano.

Cronología y delitos

En septiembre de 2015, durante sus funciones como titular de la SEDATU, se le presentó una demanda por juicio político por violaciones graves a la ley durante la investigación que encabezó por la desaparición de los estudiantes de la escuela normal de Ayotzinapa. 

En agosto de 2022, Murillo Karam fue detenido en la Cdmx por elementos de la Policía Federal Ministerial ya sin fuero político. Un día después de que la Comisión de la Verdad concluyera que los hechos y atención al caso de Ayotzinapa constituye un “crimen de estado”.

El 24 de agosto, tras una audiencia, un juez determinó que existían pruebas suficientes para vincularlo a proceso. 

Actualmente es acusado por los delitos de desaparición forzada, tortura y obstrucción de la justicia.