Un universo para niños: Jaime Alfonso Sandoval

Jaime Alfonso Sandoval, considerado por los críticos como uno de los mejores escritores de literatura infantil y juvenil, busca mundos fantásticos para ponerlos al alcance de los niños, y así despertarles esa pasión por la lectura.

En dos décadas de trabajo ha publicado más de una veintena de obras. Ganador de importantes premios nacionales y reconocimientos internacionales, ha sido traducido al francés y holandés, entre otros idiomas.

En Montena (sello de Penguin Random House) ha publicado las novelas Mexico-land, Doce sustos y un perico, Campamento Miedo y Las dos muertes, de la célebre saga Mundo Umbrío, Ciudad Miedo y Acosad@s.

Considerado como uno de los mejores escritores de literatura infantil

Leer a Jaime es despertar la imaginación, crear mundos nuevos, amigos, descubrir que los libros no muerden, no atacan ni dan sueño, bueno hablando de un buen tema, y qué tal si a esas letras le agregas aventura, ficción, miedo, todos los ingredientes fantásticos para que los niños y adolescentes le agarren ese gusto a la lectura.

“Ser escritor para niños y jóvenes no es fácil en esta época, tenemos una competencia feroz, debes de llamar la atención de los chicos que están más concentrados en una Tablet, un celular o una serie.

“Imaginen qué tanto debemos de hacer para que dejen un aparato donde tienen todo, en video o en vivo, para que vayan a los libros, para que les interese leer y se apasionen por este mundo de los libros”, respondió el también guionista cinematográfico.

Jaime Alfonso Sandoval confiesa de dónde surge tanta inspiración, en su infancia fue asiduo lector o devorador de las historias que relataban Julio Verne, Emilio Salgari o Michael Ende. Podía pasar horas navegando

Los libros de Sandoval detallan historias mágicas, ficticias y la mayoría de terror, sin embargo, las remata con un sentido del humor ágil, pero todas tienen un mensaje, tocan temas que afectan a niños y adultos.

Todos tienen un mensaje que tocan temas que afectan a niños y adultos

Los personajes pasan por momentos de depresión, sufren abuso de autoridad, bullying, chicos que no estudian ni trabajan, mejor conocidos como ninis o pasan por etapas de duelo al perder a alguien cercano.

“Tienes que acercarte a ellos, los jóvenes tienen sus problemas que muchas veces como adultos no los tomamos en serio. De ahí que es necesario construir una lectura para niños y jóvenes, con la que ellos se sientan identificados.

“Me emociona cuando van a una feria del libro y se me acercan para contarme que les gusta lo que escribo, me agradecen por tomarlos en cuenta y darles horas de distracción. También cuando los padres te dicen que gracias a mis libros sus hijos han cambiado y tienen una pasión tan bonita como la lectura te anima mucho”, respondió.

México es un país donde se lee poco, a pesar de programas y ferias aún el porcentaje de lectores es bajo, ante ello el narrador nacido en san Luis Potosí destaca que esta crisis comienza desde la infancia.

“Tenemos que ver desde la educación primaria, no podemos darles a los niños o jóvenes literatura que no es para ellos. En primaria o secundaria te dejan o te obligan a leer a los clásicos y la verdad no por ser los clásicos de la literatura universal son entretenidos para todas las edades.

“Qué hace un chico leyendo al Cid si además está en el castellano antiguo, menos le va a atraer, imagínate que debes de entregar ensayos y comprensión de lectura de obras como la Divina Comedia, así lo que haces es aburrirlos y que odien los libros”, expresó.

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Un universo para niños

Jaime Alfonso Sandoval sabe conectar, conquistar a sus lectores y eso lo agradece a su experiencia con guionista de cine, a sus estudios dentro del séptimo arte, lo cual le ayuda a crear mundos y escenarios de manera fácil.

Confiesa que sus lecturas son complicadas para plasmarlas en la pantalla, sin embargo, algún día podría aprovechar la tecnología para crear una serie.

“Sería muy caro hacer lo que escribo, es mucha imaginación, mundos, seres, todo un universo de fantasía, al ver que era tan difícil llevarlo al cine o video, pues decidí recrearlo en libros, ahí no tengo límites, puedo expandirme a gusto”, comentó.

En tanto disfruta que los niños, los críticos más honestos que pueda tener, le pidan autógrafos y le platiquen más aventuras y principalmente que los niños y jóvenes compren libros.

TAR