En el municipio de Tultepec es común escuchar estruendos y explosiones de cohetones, no solo por el trabajo que realizan los maestros artesanos de la considerada capital de la pirotecnia, sino porque a cada detonación, los habitantes saben que es emblema de fiesta patronal en algún punto de la localidad, en el norte, sur, este u oeste.
Una de las primeras interrogantes entre la población: ¿Y ahora qué se celebra?, ¿dónde toca?
Algunos recurrirán al santoral católico y ahí encontrarán la respuesta, además de reconocer que la celebración será en alguno de los barrios que conforman a Tultepec, que conserva la tradicional división y organización, legado ancestral que aún pervive y da identidad a los vecinos.
Los barrios de San Juan Xocotla, Santa Isabel Nepantla, San Martín Calvario, San Rafael Ixtlahuaca, Guadalupe Tlazintla y el de Arriba se conforman por las capillas de la Piedad y San Antonio el Cuadro; un poco más lejano de la cabecera municipal se encuentra el barrio de San Antonio Xahuento, del que data una leyenda.
Se dice que en él aparecían brujas, seres cuya parte superior del cuerpo era humana y la inferior era una bola de fuego, merodeaban al anochecer por los entonces terrenos de cultivo. Nadie sabe si era para vigilar, atrapar o solo salir a pasear por el espacio. Algunos siguen creyendo en ello.
Cada una de las demarcaciones está bajo la advocación de un santo patrón o patrona cuya imagen se encuentra en la capilla que los vecinos han edificado en cada uno de los barrios, algunas de ellas se construyeron al menos hace cien años, convirtiéndose en el punto de devoción y encuentro del vecindario y que con el correr de los años se han consolidado como elemento de identidad y han generado un sentido de pertenencia.
Los vecinos se organizan para rendir el culto y devoción en la fecha que de acuerdo con el santoral católico.
/https://wp.lajornada.prod.andes.news/wp-content/uploads/2025/03/tultepec-barrio-pirotecnia-2-497x1024.jpg)
Que se arme la fiesta
Cada capilla instalada en el municipio tiene fechas específicas de celebración, por ejemplo, en San Juan Xocotla es el 24 de junio, día de San Juan Bautista; Santa Isabel Nepantla el 2 de julio; San Martín Calvario el 11 de noviembre; en San Rafael Tlazintla el 24 de octubre; en Guadalupe Tlazintla el segundo fin de semana de enero; en la Piedad el 15 de noviembre; en San Antonio el Cuadro y en San Antonio Xahuento el 13 de junio, aunque también hay otras capillas que no son del barrio sino de una asociación, es el caso de Nuestra Señora del Refugio, San Juan de los Lagos, El Carmen, San José, San Judas Tadeo, El Señor de los Milagros, San Miguel y Santa Rita.
La organización
Las Mesas Directivas son agrupaciones que se encargan de vigilar la organización de las festividades, fungen como mayordomos, cargo que dura un año y que significa una investidura social de relevancia entre la comunidad. La mayordomía es una institución social de gran importancia en la dinámica festiva de los pueblos, barrios y comunidades y velan por la pervivencia y continuidad de las festividades religiosas y populares que distinguen a Tultepec.
Los preparativos inician con la recaudación de la cooperación entre los socios, voluntarios y el vecindario en general, para solventar los gastos de la festividad en la que se llevan a cabo ceremonias litúrgicas, música, flores y la pirotecnia. Los domingos previos a la festividad con libreta en mano, los recaudadores salen a las calles del barrio a recolectar la cooperación e invitan a los vecinos a participar de la fiesta.
Ante la víspera, un día antes del día oficial de celebración, la comunidad manifiesta emociones y la algarabía del ambiente festivo; el trajinar de mujeres y hombres de todas las edades, quienes atienden los preparativos en la capilla y en las calles aledañas a ella.
Cada capilla tiene mayordomos o encargados de la música, de las flores, de la pirotecnia, de la salva y de los toros pirotécnicos, cada uno con la responsabilidad de brindar lo mejor a la devoción del barrio.
En el atardecer de la víspera las bandas de música recorren las calles del barrio para anunciar la fiesta, junto con los toritos pirotécnicos y las alegres mojigangas, que arribarán a la capilla en donde se coloca un vistoso arco floral en la fachada de este recinto religioso y los exquisitos arreglos florales en el altar mayor al interior.
Se enciende la mecha de los toros pirotécnicos, acción que provoca entre el público asistente el bullicio y la frenética carrera para escapar de los silbatos y buscapiés que llevan estas estructuras de carrizo o de fleje de aluminio cuyo autor le dio forma de un toro, decorado además con pintura y lo proveyó de una estructura que lo corona a la que se le llama telar, que porta coloridos adornos de papel de china.
Hace varios años, los toritos pirotécnicos eran pequeños y se portaban en hombros, ahora es raro verlos, los jóvenes prefieren toros monumentales, piezas de mayor elaboración y tiempo de duración en la pirotecnia.
Al amanecer del día de la fiesta, las mujeres del barrio acuden a la capilla a entonar las mañanitas y cánticos alusivos a la imagen devocional, que ensayaron desde semanas previas. Se da paso a la salva, la serie continua de detonaciones de pirotecnia durante, al menos, una hora.
/https://wp.lajornada.prod.andes.news/wp-content/uploads/2025/03/tultepec-barrio-pirotecnia-3-1024x1024.jpg)
Los mayordomos portan estandartes, son acompañados de la banda de música recorren las calles del barrio para anunciar la festividad. Alrededor del mediodía se celebra la misa solemne y al término se dispone en el atrio de la capilla lo necesario para disfrutar de la audición que ofrecerán las bandas de música.
Llegada la hora de la comida, es la oportunidad para degustar arroz, mole de fiesta acompañado carne de pollo y de tamales de agua, son planitos y delgados, a los que se les unta mole, cuenta la leyenda que hay que prepararlos con gusto, porque si alguien se enoja durante el proceso de cocción estos no se cuecen.
/https://wp.lajornada.prod.andes.news/wp-content/uploads/2025/03/tultepec-barrio-pirotecnia-4-768x1024.jpg)
Por la tarde noche la banda de música ofrece nuevamente música, en tanto en las calles aledañas se queman los vistosos fuegos pirotécnicos preparados para la ocasión.
Al día siguiente, es la tornafiesta, hay celebraciones litúrgicas y procesión en las ermitas que los vecinos han preparado en cuatro puntos del barrio en donde se pueden apreciar bellos tapetes de aserrín, para retornar a la capilla y escuchar a las bandas de música, que por la noche se participarán en el tradicional tope, llamado así el mano a mano entre ellas, para presentar lo mejor de su repertorio.
/https://wp.lajornada.prod.andes.news/wp-content/uploads/2025/03/tultepec-barrio-pirotecnia-1-1024x497.jpg)
En este marco festivo se realizan los sorteos para la elección de los nuevos mayordomos que serán los encargados de dar continuidad a estas fiestas de los barrios y capillas, con el que se renueva el ciclo festivo y el compromiso de preservar el legado de los ancestros.
La festividad culmina con pinceladas de luz y color con las que los artesanos pirotécnicos iluminan el cielo con sus trabajos. ¡Así son las fiestas de los barrios de Tultepec!
Información de Juana Antonieta Zúñiga Urbán, cronista de Tultepec
Fotos: Mauricio Solano y Juana Zúñiga
¡La Jornada Estado de México ya está en WhatsApp!Sigue nuestro CANAL y entérate de la información más importante del día.
TAR