Aumentan depresión y ansiedad por crisis económica
Este 10 de octubre se conmemora el Día Mundial de la Salud Mental y especialistas reconocieron que la estabilidad financiera incide en la materia
Los padecimientos mentales aumentaron durante la pandemia de covid-19, la depresión y la ansiedad incrementaron y con ello el índice de suicidios, pero no sólo fue el confinamiento, la crisis financiera contribuye a la alza de casos debido a que la estabilidad financiera incide en la mental en los adultos.
En el marco del Día Mundial de la Salud Mental, que se conmemora este 10 de octubre, se dio a conocer que, como en cualquier otra enfermedad, la detección temprana de los padecimientos puede prevenir que el paciente se autolesione; sin embargo, en 90% de los casos, se busca ayuda profesional cuando la situación “ya está desbordada”.
Aumentan depresión y ansiedad
De acuerdo con Jared Salazar, psicólogo del hospital 220 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), al día atienden hasta 14 pacientes, lo que reconoce, deriva de la difusión que se ha dado sobre la salud mental y la prevención del suicidio; en especial tras el confinamiento.
“Aún quedan muchas secuelas, sobre todo porque si tenemos todavía pacientes que han perdido el empleo y lógicamente una de las cosas primordiales para poder tener salud mental es poder atender nuestras necesidades básicas, si no podemos subsanarlas, lógicamente no vamos a poder pasar al siguiente nivel de estabilidad mental”.
Prevenir crisis
Aunque los factores externos como la pandemia y la crisis económica, afectan y propician el desarrollo de padecimientos mentales, también la salud de los órganos y la producción natural o la falta de la misma de hormonas como serotonina, endorfina y dopamina, pueden influir en la materia.
Para “Laura”, tras dos intentos de suicidio, acudir a terapia y desmitificar los fármacos, significó una oportunidad de vida.
“Tú piensas que ir a terapia es bonito o que aprietas un botón y ya todo se soluciona, la realidad es que no es así, te enfrentas a tus demonios. Yo me di cuenta que tenía que hacer algo porque, realmente, no me quería morir, sólo no encontraba salida a lo que estaba sintiendo”.
“Laura”, de quien no se revelará la identidad para evitar estigmatizarla, relató que perdió su trabajo durante 2020, se dedicaba a trabajar en eventos como mesera y eso le generó deudas de las que se pudo recuperar hace unos meses.
TE SUGERIMOS: ¿Qué hacer cuando no se puede más?: Día Mundial de la Salud Mental
“Por marzo terminé de pagar pero ya no le veía fin, no sólo es que no podía pagar, me sentía chiquita, insuficiente, dejé de comer, de ver a todos, primero por la Covid y después por gusto. Me encerré y lo intenté. La primera vez sólo se quedó en eso, un intento. La segunda paré en el hospital, me salvaron la vida”.
Como en cualquier enfermedad, la detección oportuna es la clave para salvar vidas ya que, si una depresión no es atendida, puede derivar en un suicidio.
Tan sólo durante 2021, la entidad mexiquense ocupó tercer lugar a nivel nacional por suicidios, según estadísticas de Defunciones Registradas del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
En dicho informe, Guanajuato fue la entidad con la mayor cantidad de suicidios registrados el año pasado, con 4 mil 333 muertes; le siguió Baja California con 3 mil 246 y finalmente el Estado de México, con 3 mil 114.
Asimismo se detalla que la tasa de suicidio en el Edomex, en lo que corresponde a personas de entre 15 a 29 años fue de 10.3% por cada cien mil habitantes.
“Es la minoría de la gente que se da cuenta a tiempo, cuando digo a tiempo es básicamente en el primer mes en el que detectan alguna sintomatología consistente con ansiedad o con depresión, tristemente 90% de los pacientes vienen cuando ya están en el desborde”, añadió Jared Salazar.
Entre los síntomas de alerta resaltan cansancio extremo, falta de interés en actividades que antes generaban emoción, cambios en el apetito y alteraciones en los ciclos de sueño.
Actualmente se tiene detectado que en infantes y adolescentes la hiperactividad y el déficit de atención son los padecimientos más comunes, mientras que entre los adultos, la depresión y la ansiedad ocupan hasta 80% de las consultas, mismas que, a partir de la difusión de información sobre la salud mental, han aumentado hasta en 50%.
SPM