Bases artesanales del calzado se mantienen a pesar de competencia desleal

Bases artesanales del calzado se mantienen a pesar de competencia desleal

Bases artesanales del calzado prioriza materiales naturales y procesos manuales.

Brian Prado
Mayo 31, 2025

Enrique González, propietario del taller “Angelo” en San Mateo Atenco, compartió detalles sobre su trayectoria y métodos de producción. El maestro zapatero heredó el oficio de su familia y se mantiene fiel a técnicas tradicionales.

Su enfoque prioriza materiales naturales y procesos manuales en cada creación, a pesar de que la competencia con el mercado chino también le ha mermado.

Bases artesanales del calzado se mantienen a pesar de competencia desleal

Calzado artesanal como parte de la herencia

González describió los orígenes de su dedicación al calzado y los principios que rigen su taller. Explicó la continuidad de un legado familiar y las características esenciales de su fabricación.

“Llevo 30 años dedicándome al calzado por herencia de mi padre y mi abuelo y todo lo que fabricamos en el taller es artesanal, todo con materia natural, zapato de yute, de piel, dependiendo de la temporada”, comentó.

El artesano detalló las materias primas utilizadas y las propiedades de sus productos. Mencionó la durabilidad estimada y las etapas fundamentales de su proceso de elaboración.

“Trabajamos lo más natural que se pueda, el forro es de cerdo y la piel es de ternera, las suelas son antiderrapantes. Como todo dura dependiendo del uso que se le dé al calzado, pero los zapatos que fabricamos pueden durar 2 años.

Cada zapato tiene su horma, se sacan los moldes y se empieza a fabricar. Checamos los materiales, se corta con los moldes, se cose y se ensuela. Ese es básicamente el proceso que llevamos”, mencionó.

Dificultades comerciales por competencia desleal

González señaló dificultades comerciales relacionadas con la competencia internacional. Expresó diferencias en calidad y precios que afectan su posición en el mercado.

“Es un problema que hemos tenido, la baja en las ventas y que a lo mejor con el zapato chino, que puedo decir que por lo regular es de mala calidad pero aún así no podemos competir con los precios que son económicos, aunque también menos durables”, dijo.

Finalmente, el zapatero se refirió a los desafíos de distribución y las estrategias para llegar a clientes. Reconoció ciertas iniciativas municipales aunque destacó la necesidad de gestiones proactivas.

“También nuestra desventaja es que no tenemos puntos para distribuir nuestro calzado, por eso tenemos que andar buscando espacios en otros lugares, en una feria o algo. Ahorita el ayuntamiento sí nos ha volteado a ver y hace eventos, pero luego yo opto por buscar llevar mi calzado en vez de esperar a que la gente vaya, pero sí ha habido apoyo”, concluyó.

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