Chapingo se enfrenta a un campo con carencias y condiciones distintas a las de hace 100 años

Al cumplir 100 años de su fundación, la Universidad Autónoma de Chapingo (UACh) tiene el reto de adoptar tecnologías y orientar sus investigaciones a enfrentar la falta de agua y un suelo con mano de obra cada vez más escaso.

El rector Ángel Garduño García reconoció que se deben retomar las condiciones actuales del campo mexicano para atender las necesidades de producción agrícola, pecuaria y forestal que demanda la población a nivel mundial.

“El reto es retomar las problemáticas y condiciones actuales del campo mexicano, y no solo el mexicano sino el mundial, porque debemos tener claro que las condiciones de hace 100 años son totalmente diferentes a lo que vivimos ahora”, dijo en entrevista.

Foto: Miriam Vidal

Chapingo se enfrenta a un campo con carencias y condiciones distintas a las de hace 100 años

Añadió que como pueblo y como institución, se están enfrentando a problemáticas que tienen que ver con el uso óptimo del recursos.

“Nos estamos acabando el suelo, nos estamos acabando el agua, y entonces nuestras investigaciones deberán estar orientadas hacia el uso sustentable de esos recursos”, puntualizó.

Este día comenzaron los festejos para conmemorar los 100 años del traslado de la Escuela Nacional de Agricultura (ENA), del Convento de San Jacinto a la exhacienda de Chapingo, un inmueble de finales del siglo XVII localizado en Texcoco.

“En un mundo que enfrenta desafíos ambientales, sociales y económicos, la labor de nuestra universidad adquiere una importancia aún mayor, pues es cierto, quizás los problemas de hace 100 años no son los mismos a los que enfrentamos el día de hoy, pero estamos llamados a liderar con innovación, a contribuir con soluciones más sostenibles y a formar a las generaciones futuras con valores basados en el respeto por la tierra y sus recursos”, indicó.

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Tecnología en uso agrícola

En ese marco, Garduño García se refirió a la importancia de que la tecnología sea aplicada en el uso agrícola, pecuario, forestal y ambiental.

Expuso que los propios investigadores de la UACh, de los cuales el 50 por ciento están en proceso de jubilación, se han estado actualizando para que esas tecnologías se apliquen.

Destacó los avances en el uso de drones para la actividad agrícola, así como a la producción de alimentos a través de energía y suelo artificial.

Recordó también que este año la UACh destinó 25 millones de pesos a un programa de reproducción de maíz de semilla amarillo para evitar la alta importación que se registra de ese producto en el país.

Foto: Miriam Vidal

TAR