Edomex: Reforestación incorrecta en el Valle de México
Los árboles en el Valle de México son un peligro porque el 30 por ciento de los casos están muertos o enfermos con plagas, comentó Víctor Ávila Akerberg, de la organización Amigos por el Bosque.
Destacó que por eso cuando se registran ventarrones o llueve, la caída de los árboles es frecuente en municipios como Atizapán, Tlalnepantla, Naucalpan, Cuautitlán Izcalli, Ecatepec, Tepotzotlán y muchos más.
El biólogo destacó que también esto se debe porque no son especies de la zona.
Dijo que muchos gobiernos hacen una simple reforestación y esto es meter árboles sin tomar en cuenta que especies nativas eran.
Edomex: Reforestación incorrecta en el Valle de México
Lamentablemente, a veces no se tiene el éxito en las reforestaciones que se esperaba y no sobreviven ni el 80 por ciento de los árboles plantados.
Por ejemplo, Indicó, «un cedro es un árbol que muchos creen que es un pino, pero es diferente. Si se meten cedros, estos tienen unas sustancias en sus hojas que no deja crecer las yerbas debajo de su copa».
Eso es muy importante, Indicó, «porque se le debe apostar más a lo que se llama la restauración ecológica, que a diferencia de la reforestación busca si o si, utilizar las especies nativas y propias de cada lugar, porque obedece a la historia natural y evolutiva de cada sitio, todo el tiempo que le ha costado adaptarse a las especies para que se den bien y convivan bien con las otras especies».
Comentó que esto ha provocado que surjan parásitos y el estrés que ha generado a los ecosistemas del centro del país.
«Los parásitos que invaden son unos escarabajos y la lamita de estos, se comen la corteza del árbol y está lleva un hongo, que mata al árbol»
El árbol podría tolerar esos ataques, los sabría enfrentar y defenderse, pero el estrés por falta de agua, cambio climático, contaminación atmosférica y sobre explotación de algunos recursos, prácticas de minería y agroquímicos, les enferma y provoca que generen suficiente resina, que es su mecanismo de defensa para encapsular a los escarabajos.
Los parásitos los atacan, destacó, «no tienen como defenderse y los matan, aumentando la población de la plaga y fácilmente se van extendiendo a otros árboles, sobre todo pinos».
Destacó que está más o menos reforestación, lo que está bien es la restauración y lo que está pésimo, es la aforestación ( que significa meter árboles donde históricamente no había antes) y se hace con el impulso de gobierno.
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Erróneamente plantan especies que no son nativas
Por ejemplo, Indicó, tratan de meter árboles en pastizales, en llanos, lo lamentable es que ninguno de esos árboles pega y se mueren, porque son llanos naturales de condiciones planas, que en temporada de lluvia se satura de agua y esto, inunda el suelo y que el árbol se ahogue.
Eso implica desperdiciar dinero, lastimar el suelo, creando hoyos y liberar el C02 para nada.
El heno motita ataca a las especies que no son propias de la zona y las mete a sus jardines y parques. Los pinos no los afecta y son felices con esta plaga.
Los escarabajos descortezadores afectan a los pinos de las zonas bajas y montañosas de la región centro, otro que afecta es el muérdago, que crece sobre las ramas de otros árboles urbanos, como los fresnos, los colorines, los árboles frutales como los capulines y otros.
Son décadas de meter cualquier árbol que no son propios de esas zonas, lo cual ha sido un error, finalizó.
TAR