El desafío de la movilidad
Uno de los grandes desafíos metropolitanos tiene que ver con la movilidad. Las metrópolis concentran servicios, bienes, empleo y por lo tanto población.
En la presentación del libro “Preguntas básicas para conocer las zonas metropolitanas en México” la maestra Hasuba Villa Bedolla, encargada de la Dirección General de la Comisión de Zonas Metropolitanas y el Centro de Estudios Sociales y de Opinión Pública”, se dio a conocer que en México existen 74 zonas metropolitanas en donde habitan 79 millones de personas que representan el 63 por ciento de la población total del país; es decir, seis de cada diez personas.
Ahí informaron la proyección al año 2050 en el que estiman que en esas zonas metropolitanas vivirán 100 millones de mexicanos.
De manera específica, la Zona Metropolitana del Valle de México integrada por la entidad mexiquense y la capital del país, es una de las más grandes del mundo; se encuentra en las diez áreas metropolitanas más pobladas del planeta. Se estiman cerca de 25 millones de personas.
Esa concentración urbana genera retos, como el trasladarse de un punto a otro, para temas laborales, escolares y de entretenimiento, por decir algunos.
La Encuesta Origen-Destino en Hogares de la Zona Metropolitana del Valle de México refiere que cerca del 80 por ciento de la población que vive en esa región realiza al menos un viaje a la semana entre ambas entidades. De ellos, la mitad ocupa el transporte público.
Del total de viajes realizados en transporte colectivo en la Zona Metropolitana del Valle de México, 2.16 millones se producen desde la Ciudad de México a los municipios mexiquenses, que equivalen al 13.3 por ciento, mientras que 2.25 millones de viajes se realizan en sentido inverso a la capital del país.
De ese tamaño es la movilidad en la región. Cientos, quizá miles de mexiquenses invierten una buena parte de su tiempo en los traslados a las fuentes de trabajo o los centros de estudio en la capital; horas que bien podrían pasar con su familia, haciendo deporte o dedicarlas al esparcimiento que también es válido.
Tráfico, obras, más otros factores, como rutas de transporte mal planeadas, sistemas no interconectados influyen en un desplazamiento lento que impacta en la pérdida del tiempo.
El sitio web www.tomorrow.city define a la zona metropolitana del Valle de México como la región en la reina de los atracos (congestionamientos) con récord de 227 horas al año retenidas.
Recientemente el sitio especializado www.tomtom.com informó que para recorrer 10 kilómetros en la Ciudad de México se requieren 19 minutos con 20 segundos en promedio, lo que implica un tiempo en hora pico al año de 178 horas.
Ante ese panorama, todas las acciones que se realicen en movilidad serán positivas e impactarán en el bienestar de las personas. Por eso reviste importancia el reciente anuncio del inicio de operaciones de la primera etapa del tren interurbano México-Toluca; que luce como un medio de comunicación seguro, ecológico y eficiente que reducirá sustancialmente los tiempos de traslado.
DB