El reto de llegar a la cima: Alberto Lati

Así como el balón rueda en el césped de los mejores estadios del mundo con la magia de un Neymar Jr. o Karim Benzema

Así como el balón rueda en el césped de los mejores estadios del mundo con la magia de un Neymar Jr. o Karim Benzema, de la misma forma las letras van armando una ofensiva, las palabras desbordan por los extremos y con gambetas llegan a la portería contraria para crear el libro Los Genios de Qatar. De niños a cracks (Plan B), textos futbolísticos de Alberto Lati e ilustraciones de Barrilete Cósmico.

Para quienes han seguido cada una de las cápsulas del periodista deportivo es imposible no leer esta obra sin que la mente recree la voz de Lati, así, vamos descubriendo las historias de jugadores internacionales con cierto tono que le da pauta a las páginas.

“Lo que más me apasiona a de esta colección de libros que he empezado con 100 Genios del balón y ahora Genios de Qatar, es de ver a una figura, es pensar lo que hubo detrás de la estrella, porque los goles son increíbles, verlos ahora en el podio y los récords y los títulos y los millones y el amor, pero lo que hubo detrás es trabajo, es sacrificio ese esfuerzo, esa perseverancia esa fe, la entrega y darlo todo por una meta. Eso es lo que me encanta.

“Por eso me gusta investigar y compartir estas historias. Un punto de la mayoría de ellos es que no confiaban en su talento, así comenzaron muchos, nadie confiaba en ellos. Podríamos pensar que en ese tipo de talentos siempre todo el mundo creyó, pero el primero que tiene que creer es el individuo y si además cree en él la familia, como lo hizo el papá de Robert Lewandowski, pues están ahí los resultados”, comentó el experto en buscar esas historias que apasionan a los amantes del deporte.

Genios de Qatar te lleva por un viaje a distintos países

Con las historias de los futbolistas que ahora ganan millones de dólares, pero que, en su infancia, algunos tuvieron que huir de la guerra o padecían hambre.

Después de conducir la pelota y dejar atrás rivales te topas con un viejo conocido, Guillermo Ochoa, el arquero de la Selección Mexicana y del club América.

Quien va rumbo a su quinta participación mundialista si lo convocan al Mundial de Qatar 2022 y Lati le dedica el espacio para recordar que escogió su posición como guardameta luego de recibir de regalo en el Día de Reyes el uniforme de Jorge Campos.

“De alguna manera Guillermo Ochoa tendría más fácil las cosas. Muchos me dicen por qué Ochoa, porque no tengo duda que, en los últimos dos mundiales, el mejor mexicano ha sido Memo, es el mejor mundialista mexicano en Brasil 2014 y Rusia 2018.

“Fue una gran elección para que incluso aparezca en la portada, y aunque tuvo una carrera un poco distinta en el sentido de que viene de una familia en la que la comida no faltó, pero hubo que trabajar y tuvo el ejemplo de su papá que se sacrificaba por la familia”, detalló.

Gol, esa palabra que se entiende en cualquier idioma, que se grita en una cancha mundialista o un llano, es más hasta en una zona de guerra es suficiente para enlazar más historias de superación, de cambiar el hambre por viajes y reflectores.

Con las ilustraciones de Barrilete Cósmico entra a terreno de juego N’golo Kanté, campeón del mundo en 2018 con la selección francesa.

Quien en 1998 empujando una carretilla junto a su papá por las calles de París recolectaba botellas de plástico y latas de cerveza para luego venderlas y poder alimentarse.

También muestra los inicios de Alphonso Davies y Xherdan Shaqiri, ambos campeones de la Champions League, huyendo de su país siendo bebés por la guerra en Liberia y Yugoslavia, respectivamente.

De pronto, una falta en la media cancha, una pregunta que puede provocar una tarjeta amarilla, pero sin dudarlo responde, tampoco creyeron en él.

“Sí, yo me sentí muchas veces que yo mismo no creía en mí, tuve la suerte de que pude encontrar un destino, pero esa suerte se construye con base en muchas horas vuelo y es mucho desgaste y es mucho buscarle como generar lo que tienes que generar.

“Comentaristas deportivos hay muchos, reporteros y periodistas deportivos ahí miles, millones, pero tú le diste el clavo, tú dijiste aquí es y siendo sincero contigo mismo ese clavo fue apareciendo poco a poco de manera paulatina.

No es que una noche de iluminación dije ‘voy a hacer esto o quiero posicionarme de esta manera’, si hubiera querido generar un personaje como el que tuve el privilegio de que se generará, no me sale”.

En la obra actual que se basa en quienes irán a Qatar, el también conductor de televisión y radio realiza una amalgama de razas e incluso de creencias religiosas.

Americanos, europeos, africanos o asiáticos, todos son ejemplos que Alberto Lati enaltece

“En el libro genios de Qatar vemos una amalgama de razas incluso de razas de creencias y eso a mí me encanta, aunque no haya sido pretendido.

Yo no buscaba una inclusión, buscaba contar historias de grandes futbolistas que van a estar el Mundial de Qatar como lo busqué en 100 años de balón, con los 100 mejores de la historia con 100 dioses del Olimpo, los mejores atletas olímpicos de la historia.

“Lo que busco es compartir el trabajo que hubo detrás, pero ya después te encuentras al coreano, Son (Heung-Min), te encuentras a refugiados de la guerra de Liberia en África como Alfonso Davis te encuentras a personajes de cualquier confín de Europa.

“Las Islas Británicas con Harry Kane, en otra esquina Portugal y te sigues moviendo por todo el continente y ves a algún refugiado kosovar ahora en Suiza como Xherdan Shaqir”.

De las historias en su libro, hay una que le toca las fibras sensibles, que lo mueve a seguir investigando y es la de el senegalés Sadio Mané, el que vivió en la zona más afectada por el hambre y tan pobre que no había médicos.

“Mané vivía en una aldea donde no había siquiera hospitales y que eso pudo precipitar la muerte de su padre. Me toca mucho eso y que lo primero que hizo Sadio Mané en cuanto ganó dinero como profesional fue construir un hospital en esa localidad de la frontera entre Senegal y Guinea”.

Y así, como la de Mané, hay historias en todo el mundo, las mismas que esperan que Lati las plasme en un libro, en un video o en un documental.

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