Iraida Noriega, la voz de la sensualidad

Cuando toca el escenario, su mirada y su cuerpo lo sienten, lo vibran y lo proyectan. Se desprende un gozo que solo ella puede compartir de tú a tú con su público. La música la envuelve en un éxtasis que transmite con una alegría singular, cargada de humor y espontaneidad. Es Iraida Noriega, la voz de la sensualidad, del jazz, del bolero, del rock o de lo que a ella le plazca. 

Iraida Noriega, la voz de la sensualidad

Su canto retumbó, en los muros de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México (UACM), en un concierto muy íntimo al que llamaron #NuevaEstación. La sala, repleta de estudiantes y docentes, se inundó de la magia y los recuerdos de temas icónicos ochenteros que marcaron historia, aquellos “de cuando iba en la secundaria”, describe una jovial Iraida.

Las letras de Gustavo Cerati, Mecano o Miguel Mateos fueron escuchadas con un deleite exquisito. Los arreglos a cargo de la misma Iraida y el trío que la acompañó, conformado por Israel Cupich en el contrabajo, Tavo Nanda en la batería y Roberto Blanco en el teclado, hicieron que las nuevas versiones fueran extraordinarias.

Ojalá tuviera la energía que hay en ti para romper cadenas, dice una de las letras de Cerati; que en la voz de Iraida se vuelve poesía pura. 

De entre el público se hace alza un grito de amor que agradece el haberlo llevado hasta las lágrimas; a lo que ella revira el elogio con humildad para agradecerle a él recibir su música.

Ofreció un concierto, al que llamaron #NuevaEstación, en la Universidad Autónoma de la Ciudad de México

A mitad del concierto, la cantautora sorprendió a la audiencia con dos estrenos maravillosos: un arreglo del tema “Palabras” de la compositora cubana Martha Valdés; y otro de “Sulky” de Gustavo Ceratti; los cuales describió como un reto porque “para mi fue necesario y obligatorio hacer estos arreglos. Una nueva versión, para una nueva idea”. 

Esto justo es lo que describe la esencia de esta gran artista que no deja de experimentar y de reconstruirse a sí misma.

Durante hora y media el público recibió un regalo incomparable: la voz y la música de una Iraida amorosa, generosa y apasionada. Un concierto donde la improvisación, las historias y la hermandad permanecerán en la memoria de los que asistimos.

Iraida Noriega es considerada una de las máximas exponentes del jazz nacional. Con 35 años de carrera, para muchos es la poseedora de la carrera más solida y constante, al poseer una fuerza artística versátil y experimentada. 

Con más de 20 grabaciones discográficas, así como décadas dedicadas a la docencia, la producción y a formar vínculos en la comunidad artística de la que es parte, la cantante y compositora se hizo merecedora de la Medalla al Mérito en las Artes en 2022. 

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