Música y teatro en honor a los difuntos en el Festival de Las Almas
Desde Valle de Bravo presentó a “Monocordio”, además de la obra “¡Ay Llorona!”
Este domingo desde Valle de Bravo, se presentó la legendaria banda mexicana “Monocordio” y la obra de Teatro “¡Ay Llorona!” Leyendas de México musicalizadas. Eventos llenos de emoción, pues significaron el regreso a los escenarios de los artistas. Se tuvo un aforo controlado y medidas sanitarias previo al acceso.
La décimo octava edición del Festival de Las Almas 2020, que también se transmite vía redes sociales en Facebook y Twitter @CulturaEdomex, ha permitido que el público de otras latitudes se una a los eventos culturales.
Monocordio, con más de 20 años de carrera musical, ofreció un concierto donde le cantó al amor y al desamor, a la vida y a la muerte, lleno de nostalgia y agradecimiento.
«hace tanto que no podíamos compartir nuestra música, que este festival se ha convertido en algo maravilloso. Este festival es algo muy bonito que nos da la enorme oportunidad de estar juntos»
Fernando Rivera Calderón
Algunos de los temas rockeros interpretados fueron: «Es la hora del tiempo», «La verdad es una mentira a los ojos de quien la mira», «Chicas en bici», «Me haces existir», tema dedicado al hijo del también conductor del programa de televisión “Me canso ganso”.
Rivera Calderón reconoció que para él, la inspiración para componer nace del contacto humano, y aunque en estos meses no lo ha tenido, escribió el tema “Hasta el fin”, el cual denota todos esos sentimientos que hemos tenido con esta cuarentena.
“esta canción representa el amor y la grandeza; los seres que han compartido la contingencia en casa, con paciencia y fuerza para salir adelante”.
Y llegó el cuenta cuentos
Posteriormente el cuenta cuentos Apolonio Mondragón, acompañado de Guillermo León y Omar Lowen en las cuerdas, composición y arreglos, presentó la obra ¡Ay Llorona! Leyendas de México musicalizadas.
Fue preparada, especialmente para este festival, con el objetivo de revivir la magia de las historias y la tradición de la oralidad, haciendo hincapié en los comportamientos que como sociedad debemos reforzar para ser mejores.
Los protagonistas aseguraron que “el pecado es lo que tiene a uno intranquilo”, por ello son ánimas que penan y que vuelven una y otra vez a querer componer sus errores para buscar la tranquilidad y visitar una ofrenda.
ASME
