Nacimientos navideños de Metepec, una tradición que trasciende fronteras

Metepec destaca por su gran vocación alfarera

En el Pueblo Mágico de Metepec, esta tradición se remonta a siglos atrás, y es gracias al trabajo de los artesanos alfareros que los nacimientos de Metepec son conocidos y apreciados en todo el mundo.

En el Barrio de Coaxustenco, se encuentra el taller de alfarería de la familia Rodríguez Carrillo. César, uno de los hermanos, lleva 25 años trabajando en esta rama artesanal, y 15 años elaborando nacimientos.

Nacimientos navideños de Metepec

“Es un taller familiar, somos tres hermanos. Ya ellos me enseñaron a trabajar y empezamos a hacer flores, hojas, moler el barro y prepararlo. Ya me enseñaron a hacer las piezas bien acabadas”, cuenta César.

La principal herramienta de los hermanos Rodríguez Carrillo son sus manos, pero también utilizan barro, plumilla, agua y gas para la quema. El horno para colocar las piezas debe estar a una temperatura de 800 grados.

“Moler el barro, mezclar el agua con la plumilla, empezar a levantar los cuerpos, dependiendo el tamaño se empiezan a levantar los cuerpos, se hace un tubo o ya se tiene el molde del cuerpo y las caras, dependiendo, cada pieza lleva un estilo diferente. Ya sean los Reyes, José, María. Cada nacimiento se compone de 11 piezas”, afirma César.

Desde el mes de febrero, los hermanos Rodríguez Carrillo empiezan a elaborar cada pieza de los nacimientos. Algunos clientes especifican cómo quieren sus nacimientos, por lo que pueden variar en tamaño y detalles.

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“Las piezas principales son José, María, el Ángel, el Niño Dios, Toro, Mula, los tres Reyes Magos, un pastor y una pastora. Ya de ahí se puede hacer más grande, me han pedido piezas que quieren que lleve el camello, elefante, el caballo, pozos, puente, animales, borregos, patos; lo normal son 11 piezas pero puede variar, una vez hice un nacimiento de 35 piezas”, comparte César.

Es una tradición colocar el nacimiento en el hogar

La familia Rodríguez Carrillo está orgullosa de ser artesanos alfareros mexiquenses y de saber que sus obras han llegado a Canadá, Japón y Francia.

“Estamos muy contentos de que nuestros nacimientos sean apreciados en otros países. Es un orgullo para nosotros”, dice César.

Actualmente, el nacimiento que más se elabora y vende es el de las piezas que tienen un tamaño de 25 centímetros. Esto se debe a la economía y espacio de los clientes.

César recuerda que en otros años era muy vendido el de un metro con 50 centímetros cada pieza.

En esta temporada navideña es importante consumir local y apoyar la economía familiar de las y los artesanos como la familia Rodríguez Carrillo.

“Les invitamos a que visiten los talleres para que conozcan el proceso de las piezas y se lleven una pieza que les llegue a agradar y a muy buen precio, a precio de taller”, puntualiza César Rodríguez.

Los nacimientos de Metepec , elaborados por manos artesanas preservan una tradición.

SPM