La presidenta municipal de Cuautitlán, Juana Carrillo Luna, encabezó este miércoles la colocación de sellos de suspensión en un Centro de Distribución (Cedis) que afectó directamente el cauce del histórico Río Chiquito.
Obras afectaban al Río Chiquito en Cuautitlán
“Lo quieren desviar y desaparecer”, alertó la alcaldesa, quien denunció que la empresa desarrolladora no cuenta con permisos municipales y comenzó actividades sin autorización, invadiendo además la vía pública y usándola como patio de maniobras.
El proyecto, ubicado junto al templo de El Cerrito, no solo representa una agresión al cauce natural del río, sino también amenaza con talar antiguos ahuehuetes, árboles centenarios que forman parte del patrimonio forestal de Cuautitlán.
“Quieren desaparecer el río, tener una entrada y acabar con los ahuehuetes históricos; ni siquiera banqueta quieren dejar”, reclamó Carrillo Luna.
La alcaldesa informó que su administración notificó a la Comisión Nacional del Agua (Conagua), debido a que se trata de un río de competencia federal.
Se realizará próximamente el alineado correspondiente
Advirtió que la intervención podría constituir un delito ambiental, al intentar modificar un afluente clave para la prevención de inundaciones y la recarga de mantos freáticos.
Como parte de las acciones inmediatas, personal de la Dirección de Desarrollo Metropolitano realizará próximamente el alineado correspondiente, con el objetivo de garantizar la construcción de una banqueta y preservar el acceso adecuado para los vecinos de las comunidades de La Capilla y El Sabino.
“Vamos a cuidar los accesos, las banquetas, los árboles y los ríos de nuestra gente. El desarrollo no puede hacerse a costa del bienestar de la comunidad”, concluyó Juana Carrillo, quien lamentó que algunos promotores prioricen sus intereses económicos por encima del entorno natural y la vida cotidiana de los habitantes.
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SPM