Trabajadores de la Coordinación de Regulación Sanitaria Toluca piden ser reubicados

Trabajadores de la Coordinación de Regulación Sanitaria y de la Comisión para la Protección Contra Riesgos Sanitarios, dependientes de la Secretaria de Salud de la entidad exigen ser reubicados a un nuevo edificio, ya que el inmueble en el que laboran actualmente presenta daños estructurales severos, situación que pone en riesgo la vida de al menos 179 empleados.

Trabajadores de Regulación Sanitaria piden ser reubicados

La mañana de este martes, un grupo de al menos 30 trabajadores se manifestaron nuevamente en las inmediaciones del edificio ubicado en la esquina de las calles Josefa Ortiz de Domínguez y José María Moleros y Pavón, colonia San Sebastián, en la capital mexiquense, demandaron el cierre del lugar o al menos la reubicación del personal.

Rubén Garduño Santana, representante sindical de la Coordinación de Regulación Sanitaria comentó que a pesar del riesgo inminente en el que laboran casi 180 empleados, los encargados del edificio en cuestión los obligan a seguir trabajando, situación que motivó a los servidores públicos a salir a la calle para manifestar su inconformidad.

“No es la primera vez que denunciamos las malas condiciones del edificio, nos hemos cansado de enviar oficios y decirles a las autoridades del sector salud que el lugar no ofrece garantías de seguridad, que estamos en riesgo, que el inmueble tiene fallas estructurales en escaleras, muros y cristales, sin embargo, solo nos ignoran”.

“En este momento el sito no es seguro, por eso demandamos la intervención inmediata de las autoridades de salud para que determinen el cierre del edificio y nuestra reubicación a un lugar más seguro”, indicó Garduño Santana, quien aseveró que la administración de la dependencia estatal cuenta con resultados de análisis de riesgos del inmueble, pero se niegan a reconocer que es una edificación insegura.

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Daños al edificio han incrementado

El representante sindical detalló que, de enero a la fecha, los daños estructurales se han incrementado, hace un mes se registró un asentamiento que afectó escaleras y muros, y hace unos días ocurrió otro, dañando la tubería del tercer piso, situación que encendió las alarmas, “ya no es negociable continuar en ese lugar, nuestra vida corre peligro”.

Por ahora, los afectados dijeron que se presentarán a las oficinas, pero bajo ninguna circunstancia ingresarán al edificio, por lo que dijeron que trabajarán bajo protesta, incluso expresaron que no se moverán de la zona hasta que sean reubicados.

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MPH