De verdad es preocupante todo lo que está pasando nuestro país. De sopetón, la semana pasada se vio, al principio (y fue quitado por todos los medios, incluso el de Azteca) al hijo del presidente Trump, decir que a México se le liquida en un instante. “Si México, digamos, dispara misiles a Estados Unidos, sería decapitado en unos segundos”. Aseguró Eric Trump que su país tardaría cuatro segundos en “decapitar a México”, luego de comparar el conflicto entre Irán e Israel con un escenario similar, entre su país y su vecino del sur. Hágame usted el favor. ¡Habrase visto tremenda ofensa!, ¡Si ni siquiera lo conocemos!
Luego en la semana, vimos con gran asombro, que tres de los bancos que estuvieron cerca del expresidente, ahora son señalados como lavadores de dinero. Muy difícil la situación en la que tienen a la presidenta de este país. Mi México tan amado.
La clase dirigente detentora de los medios de producción que regulan el mercado global mundial, y más aún en estos tiempos de los medios de comunicación masivos, con los cuales es posible generar ideologías y moldear modos de comportamiento colectivo para una determinada causa, propician la erosión paulatina del concepto de colectividad o solidaridad comunal de muchas de nuestras poblaciones.
Se entenderá, pues, por solidaridad, la definición clásica del sociólogo francés Durkheim, quien dice que en todas las sociedades se desarrollan lazos de unión y cohesión entre los individuos, que los identifica.
La solidaridad entre los individuos de la sociedad es un vínculo susceptible de desarrollo. El derecho y la división del trabajo contribuyen a que esta solidaridad trascienda a niveles superiores.
El autor distingue diversos tipos de solidaridad: la mecánica y la orgánica, como mera aclaración solo se mencionan. La solidaridad orgánica es la que se desarrolla en sociedades más avanzadas, es decir, más modernas.
La solidaridad orgánica constituye la conciencia colectiva de las comunidades, con la cual se identifican los miembros de esa población, y genera una forma superior de organización social en tanto los individuos aun siendo diferentes entre sí, se cohesionan para lograr un bien común sacando a flote, con ello, su conciencia colectiva.
Esta conciencia colectiva es la que regula la actuación de los pueblos y siempre se busca atrapar por la clase dirigente para legitimarse.
La modernización ha trastocado esta conciencia, volviendo al individuo más preocupado de sí mismo que de ayudar en forma organizada a la comunidad; las grandes ciudades son el prototipo de esa individualidad, basta viajar en una hora pico en el metro y ver cientos de caras desconocidas, o mostrarse indiferente ante situaciones típicas de necesidad de varias personas. La palabra que califica este fenómeno es conocida como deshumanización.
Los conceptos de ayuda mutua han perdido su esencia, solo en las grandes tragedias parece aflorar nuevamente como una flor en un inmenso jardín de concreto, para después ser guardado en el baúl de los recuerdos, o ser sepultado por los enormes condominios familiares, en donde lo que menos importa, es conocer quien vive en el último piso. La individualidad pasa a ser la esencia de la colectividad. Repito: No, en las grandes tragedias.
La modernidad o el imaginario social de lo que debe ser México, presente en gran parte de los actores protagónicos de la política, gana batallas. Ojalá que en este preciso momento en que tanto necesitamos de la solidaridad y del amor hacia nosotros mismos, también ganemos la batalla. Muy difícil situación.
Habrá que buscar una muy inteligente estrategia para, después de pensar, dirigir a México. Estrategia es el arte de proyectar y dirigir operaciones militares, especialmente las de la guerra. Ahora que se les está dando todo a ellos, habrá de pedirles que hagan algo magnífico, además del Tren- Maya y el AIFA.
Napoleón Bonaparte fue uno de los mejores estrategas militares. Hay que estar anticipados. Esto es poder ver un poco más allá de lo que ven las personas. Un estratega es un visor. Que vea los movimientos de las otras personas, para poder anticipar los movimientos del adversario y poder estar preparado. Es una labor de inteligencia, prever, anticiparse a los actos del adversario. Ser visor es una actividad. Las campañas son una competencia por el poder político. Todas tienen una composición de guerra sucia. Y nosotros tendremos que valorar todo esto, para defendernos. Pero… nosotros no tenemos ni hacemos bombas. Solo las de Yucatán. Y esas no se las damos a nadie…
Aunque usted no lo crea.
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MPH