El presidente y tesorero de la Central de Abasto de Toluca, Jesús López García y Luis Alberto Bobadilla, respectivamente, se dijeron inocentes y afirmaron que su detención por supuesta extorsión tuvo la finalidad de desestabilizar la administración que dirigen.
Durante la noche del jueves, ambos lograron salir del penal de Santiaguito en Almoloya de Juárez, aunque reconocen que tienen temor por ellos y sus familias, pues el procedimiento continúa.
Presidente y tesorero de la Central de Abasto de Toluca temen por su seguridad
Ante medios de comunicación, López García afirmó que desconocen a la persona que presentó la denuncia en su contra, pues rechazó tajantemente haber tenido alguna relación.
Descartó que la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) se beneficie con la fabricación de delitos en su caso y por ello pidió un juicio justo, además que manifestaron su disposición a que sean investigados.
Por su parte, Luis Alberto Bobadilla recordó que no es la primera vez que los tratan de inculpar de un delito, pues el 12 de julio del 2024 también ocurrió, aunque lograron comprobar su inocencia.
Negaron tener algún nexo con un grupo de la delincuencia organizada y afirmó que todo lo que se ha dicho en redes sociales es mentira, pues todos en la Central de Abasto los conocen y por ello dan la cara.
Reiteró que presentaron un amparo ante la instancia federal que les permitió salir en libertad, aunque no quieren abundar más en la información del caso.
Ambos aseguraron que han velado por la seguridad de la Central de Abasto de Toluca y de la población en general, por lo que se han coordinado con las autoridades municipales y estatales para combatir los delitos.
Acusación
El Ministerio Público estatal compartió que los hechos por los que se le investiga a tres integrantes de la mesa directiva son del 4 de febrero de este año, cuando su víctima acudió a las oficinas de la mesa directiva de la Central de Abasto de Toluca en San Mateo Otzacatipan, para cobrar sus honorarios como asesor jurídico de los ahora detenidos, quienes estaban relacionados con un hecho delictivo diverso.
Estos individuos se negaron a pagarle y habrían amedrentado a la víctima al presumiblemente ostentarse como integrantes de un grupo delictivo con orígenes en el estado de Michoacán.
La persona afectada pretendió retirarse del sitio, no obstante, al exterior de las oficinas estaba Sergio “N”, quien laboraba como jefe de seguridad de los investigados, mismo que al parecer lo amenazó con un arma de fuego y dijo que debería trabajar para ellos sin honorarios.
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TAR